Comunicado de prensa del proyecto europeo BADGER

En los últimos años hemos visto notables avances en la robótica terrestre (por ejemplo, humanoides y rovers), aérea (por ejemplo, drones) y submarina (por ejemplo, ROVs). Sin embargo, en la actualidad estamos a punto de presenciar otro desarrollo tecnológico definitorio de gran impacto social y económico: BADGER, un nuevo tipo de robot que integrará un sensor y una unidad de control capaz de realizar una navegación subterránea autónoma.

Imaginemos por un momento que queremos conectar dos edificios situados en lados opuestos de una calle principal, en una ciudad moderna, con un cable de comunicación como la fibra óptica. No debería sorprendernos, sin embargo, que a pesar de ser la solución más comúnmente aplicada, hacer zanjas en este tipo de operaciones, inevitablemente llevará a una interrupción del flujo de tráfico, molestias para los peatones y contaminación ambiental.

El robot BADGER, sin embargo, evitará todos estos problemas gracias a la tecnología sin zanjas haciendo un pequeño agujero en el suelo donde se colocará el cable. Mediante el uso de sensores a bordo (por ejemplo, georradar y codificadores) y un algoritmo de control inteligente, el robot navegará de forma autónoma desde el sótano de un edificio al otro, evitando colisiones con tuberías de gas y agua, túneles de metro, grandes rocas, etc.

Además, el robot BADGER no sólo se utilizará para la perforación subterránea urbana, sino también para otros numerosos y valiosos propósitos que van desde el análisis del suelo antes de cualquier construcción subterránea, operaciones de rescate en desastres naturales o artificiales, exploración planetaria subterránea, etc.

BADGER (RoBot for Autonomous UnDerGround Trenchless OpERations, Mapping and Navigation) es un proyecto financiado por Horizonte 2020 de tres años de duración, con 3,7 millones de euros asignados para su desarrollo, y un consorcio internacional compuesto por siete socios de cinco países: España, Alemania, Italia, Grecia y el Reino Unido. Los coordinadores del proyecto, la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M) prevén el desarrollo del primer prototipo durante el año 2018, pruebas de campo a partir del primer trimestre de 2019 en Alemania, y una versión comercial del sistema disponible en 2020. Este es uno de los ocho proyectos seleccionados, entre 114 propuestas (7% de éxito), de la convocatoria LEIT ICT-25-2016.